Luis Gratitud5Chiringuito-restaurante en la zona más oeste de la Casa de Campo. Un lugar espléndido para tomar algo o comer en días soleados. Se suele llenar, paciencia. El lugar merece la pena. Se puede llegar en coche o en bici. La comida no es lo más rico, tirando a normal pobre. La carta son de esas interminables que tienen de todo… ya sabemos: “quien mucho abarca, poco aprieta”. Es el entorno lo que hace de este sitio un lugar especial.Puri Camacho5Hemos comido muy a gusto en la terraza con carpa. Espacio bien ventilado, buena separación de mesas, camareros muy amables y atentos y servicio bastante rápido. Limpieza baños mejorable. En cuanto a la comida, el pastel de cabracho buenísimo, el solomillo con foie delicioso pero el rape un poco pasado de punto, fue la única pega, hay que controlar mejor el tiempo del pescado. Hemos estado súper bien. El precio medio-alto, especialmente postres y bebidas (arroz con leche 6 euros lo he visto desproporcionado). Repetiremos más adelante para probar más cosas de la carta que nos hemos quedado con las ganas.